¡Cristo viene! ¡Despierta! ¡Cristo viene!

Lucas 17: 26-30

Los tiempos han cambiado, tenemos más acceso a la información por medio de una tecnología que cada día más está en aumento, la cultura a cambiado los roles en el hogar por una mayor demanda de poder adquisitivo y los pensamientos de la minoría dictan que debe pensar y hacer la mayoría.

Son cambios nunca antes vistos pero aceptados en un mundo individualista que cada quien está ocupado de sus propios asuntos e intereses y donde las cosas cotidianas parecen absorber todo nuestro tiempo donde no podemos si quiera sacar un espacio para las relaciones, tiempo de calidad en familia y mucho menos poder detenernos y reflexionar que el tiempo se acorta y el juicio se acerca.

Con regularidad vemos señales de terremotos, guerras y levantamientos sangrientos en miembros de una misma familia y pensamos “wow la palabra de Dios está llevándose a cabo” y termina pasando como un pensamiento fugaz en medio de nuestra ajetreada tarea y llama la atención que así de distraída se encontraban las personas en sus propios asuntos en los tiempos de Noé sin percibir que el mal venía sobre ellos e igual en los tiempos de Lot. 

Lo doloroso de escribir esto es que es la misma manera en que la iglesia de Cristo se encuentra envuelta en sus asuntos, sin darse cuenta que nos queda poco y debemos velar para que cuando Cristo venga nos encuentre haciendo su voluntad y no la nuestra. ¡Despierta!